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viernes, 4 de enero de 2008

Martín (Hache) - Adolfo Aristarain

Vemos aquí uno de los momentos más brillantes de "Martín (Hache)", film de Adolfo Aristarain.

En él podemos observar como Dante, interrumpe una obra de teatro que está interpretando, para tocar las conciencias de los espectadores que observan el espectáculo. Al final acaba abandonando el teatro con Hache. No tiene desperdicio la secuencia.

MIs directores favoritos: I. Adolfo Aristarain.



Con el bonaerense Adolfo Aristarain, comenzaré un ciclo en el que hablaré de mis directores de cine favoritos. Nacido en 1943 en Buenos Aires, como ya he dicho, Aristarain es un director que se ha labrado una carrera desde lo más abajo. Fue ayudante de dirección en sus inicios, de directores como Mario Camus, Vicente Aranda o Sergio Leone. Así conoció la profesión desde dentro y pudo realizar su primer largometraje, "Tiempo de Revancha" de 1982, protagonizada por Federico Luppi.

El cine de Aristarain mezcla a la perfección los elementos clásicos del cine de siempre, con un compromiso social, propio del cine latinoamericano. Sus películas son inteligentes, de diálogos brillantes y de personajes bohemios, que cautivan al espectador. Sus historias, por lo general, alternan España y Argentina como espacios, lo que denota un cierto toque autobiográfico. Siempre utiliza en sus películas, actores de gran calidad interpretativa, como Federico Luppi, Juan Diego Botto, Cecilia Roth, José Sacristán, Eusebio Poncela o Mercedes Sampietro.

De las películas que he visto de dicho director, comenzaré hablando de "Un lugar en el mundo". Seguramente la película más premiada de este director. Habla de la búsqueda de un lugar en el mundo, expresado a través de Ernesto, un niño, ya casi adolescente que está rodeado de Mario (Federico Luppi), su padre, siempre luchando con el cacique de la zona Andrada, Ana (Cecilia Roth), su madre sentimental y luchadora y Hans (José Sacristán), un geólogo español que llega al lugar en búsqueda de petróleo a las órdenes de Andrada, aunque con el tiempo se dará cuenta de las injusticias del cacique y apoyará a la familia de Ernesto en su lucha. A raíz de ahí se irá hilando una historia entrañable por momentos, en otros resulta dolorosa.

"Martín (Hache)", para mí la mejor película de este director y una de mis cinco películas favoritas, es una historia de un joven sin rumbo, Hache (Juan Diego Botto). Se llama Martín, como su padre (Federico Luppi), sin embargo todos le llaman Hache, por ser lo que le distingue del padre (Martín Hijo), lo que no obstante le niega una identidad propia. En Buenos Aires ni estudia ni trabaja, sólo toca rock y coquetea con las drogas. Con éstas de protagonistas, sufre un accidente que le deja cerca de la muerte, lo que le vuelve a reunir, por diversas circunstancias con su padre en España. Allí se encuentra con la novia de su padre (Cecilia Roth), una mujer apasionada y adicta a la cocaína, que sufre por la falta de afecto que le ofrece Martín y con Dante, el único amigo de su padre, un actor homosexual y consumidor de diversas drogas, un espíritu libre que vive a su antojo en un mundo que no lo acepta. Todos piensan que Hache tiene intención de suicidarse, pero no es del todo cierto. Hache coge cariño y huye, el que ama está expuesto al dolor. Al final y al cabo, la conclusión que yo saqué de la película es que Hache no es más que un reflejo de su padre. Cobarde, con un vacío en su interior, que se prohibe ser feliz y que no afronta las cosas de frente.

Por su parte "Lugares comunes", me recuerda peligrosamente a "Un lugar en el mundo". Es una lucha continua contra el mundo en busca de defender los ideales, en el caso de los protagonistas de este film, Fernando (Federico Luppi) y Liliana (Mercedes Sampietro), son de izquierda. A Fernando Robles, profesor, lo han jubilado prematuramente por la crisis del país. Eso les lleva a un problema económico que quizá se subsane si le piden a su hijo (Carlos Santamaría), que vive en Madrid. Sin embargo tanto Fernando como Liliana, consideran que su hijo se ha aburguesado y no ha luchado por su verdadera vocación que era la escritura. Cuando parece que no hay otra salida que pedirle ayuda a su hijo, consiguen vender su departamento céntrico en Buenos Aires y compran una chacra en Córdoba, donde comienzan una nueva vida.

Y por último "Roma", una película dedicada a una madre a la que se le ha fallado en parte. Joaquín Goñez (José Sacristán de viejo, Juan Diego Botto de joven) es un escritor que hace tiempo que no escribe. Entonces decide escribir su autobiografía. Para ello la editorial le manda a Manuel Cueto (Juan Diego Botto). La relación al principio es tirante, pero con el tiempo y según transcurre la historia de la vida de Joaquín, el acercamiento es evidente. La vida del escritor está unida a su madre Roma (Susú Pecoraro), para quien su "Juaco" es los ojos con los que mira. Empero, Joaquín no es feliz con su vida, le falta algo y comete error tras error. Su madre muere estando él en España y ahí termina su historia, como si realmente su historia sólo tuviera sentido por su madre.

Vemos como en la filmografía de Adolfo Aristarain priman los personajes leales a sus ideas y que tienen unos miedos distintos, pero aproximados. También observamos como en cierta medida, estos personajes se autodestruyen defendiendo tales ideales, de una forma radical, al todo o nada.

jueves, 3 de enero de 2008

Canarias, por un sueño




El pasado viernes 28 de diciembre de 2007 se celebró el partido internacional amistoso que enfrentaba a la selección nacional canaria contra la mundialista Angola. Al plantear el artículo, no sé si hablar sólo de fútbol, pero no me da la gana la verdad, quiero hablar también de todo lo que representa para Canarias su selección nacional.

EL PARTIDO:



Partido intenso y bonito de ver, el que presenciamos los más de 10.000 espectadores que acudimos al Estadio de Gran Canaria. La primera parte fue dominada territorialmente por Canarias, que tenía mucho más el balón. Silva sólo jugó unos 20 minutos, pero mientras duró en el campo, fue el líder de los canarios. Al valencianista lo sustituyó Ricardo, que, aunque muy falto de la calidad que atesora el de Arguineguín, puso criterio en la zona ancha junto a un gran Nauzet Alemán. El primer período se cerró con un gol de Adrián Martín, jugador del Xerex.

La segunda parte se inició con el gol de Jorge Larena, uno de los numerosos cambios que se produjeron, tras una gran jugada colectiva del combinado de Ruiz Caballero. Los angoleños en este período, fueron más incisivos de cara a la portería de Javi Ortega. Manucho, jugador recientemente fichado por el Manchester United, era el jugador con las ideas más claras de los africanos. Por su parte Canarias bajó el pistón y lo único reseñable fueron las acciones de Rubén Castro y Pedro Vega, este último fuertemente pitado por la afición de la U.D. Las Palmas. Sinceramente me parece penoso, más allá de que el gesto de Pedro Vega fuera insolente ante toda la afición de la U.D. al marcar el gol con el Poli Ejido. Este tipo de detalles son los que me parecen de equipo pequeño, ¿por qué se le pita a dicho jugador si está defendiendo la camiseta de nuestra selección? Ya habrá tiempo para echarle en cara al de San Mateo su acción. Los últimos minutos la afición incluso animaba a Angola al marcar el gol de la honrilla, que nunca llegó, dado el poco acierto de las "palancas negras".

Canarias: Ione Puga; Ángel López, David García, Alexis Suárez, Juanma; Adrián Martín, Nauzet Alemán, David Silva, Jonathan Sesma; Cristo y Braulio. También jugaron Ricardo, Javi Ortega, Pablo Sicilia, Aythami, Carmelo, Ayoze García, Jorge, Rubén Castro, Pedro Vega, Ione Jiménez, Momo y Moisés Trujillo. Seleccionador: José Antonio Ruiz Caballero.

Angola: Lama; Loco, Jamba, Kali, Yamba Asha; Ze Kalanga, Dede, Figueiredo, Mendonça; Love; y Manucho. Asimismo intervinieron Edson, Diangi, Delgado, Petro, Airosa, Minguito y Santana.Seleccionador: Luis Oliveira Gonçalves.
Goles: 1-0, min. 39: Adrián Martín, de disparo cruzado. 2-0, min. 47: Jorge, a pase de Rubén Castro.

SIGNIFICACIÓN DEL PARTIDO, BÚSQUEDA DE IDENTIDAD Y MEDIOS DIFAMADORES:



La celebración del partido fue todo un éxito, ya que acudieron más de 10.000 espectadores. Los que estamos acostumbrados a ir al Gran Canaria cada quince días, sabemos que dicha entrada no difiere mucho de lo que se registra en un encuentro de Las Palmas.

El grupo "Alzadas Canarias" fue uno de los más activos, tanto antes como durante el partido. Unos días antes había escrito un comunicado en el que pedía la oficialidad de la selección canaria (http://www.alzadascanarias.org). En él se plantean argumentos como la identidad canaria, la deuda histórica con una cultura que ha sido muchas veces menospreciada y la posibilidad legal de ser selección oficial, a pesar de no ser un Estado. Bajo mi modesta opinión, creo que los argumentos dados son muy válidos y creo que una de las cosas que más ilusión me harían en esta vida sería ver jugando a Canarias un mundial de fútbol.

Por otra parte, el día del partido exibieron una gran bandera tricolor de las siete estrellas verdes y lemas como "UNA NACIÓN, UNA SELECCIÓN" (retirada por operarios del Estadio, por inducir supuestamente a la violencia) o "CANARIAS NO ES ESPAÑA". Tengo que decirle a los que puedan pensar lo contrario, que "Alzadas Canarias" no es ni un grupo terrorista, ni un grupo violento, ni radical, ni nada de eso, simplemente es un grupo de animación de la selección canaria, que ante todo defiende lo canario, algo que hace mucha falta a nuestro pueblo, inmiscuido en una crisis de complejo de inferioridad, demostrado en el vergonzoso programa "En clave de ja" (http://izuran.blogspot.com/2008/01/comunicado-en-clave-de-ja-se-burla-del.html) y en la asquerosa Televisión Canaria en general.



Luego están los incidentes fuera del Estadio. Decir que yo los viví de cerca, ya que en ese momento había ido a buscar a una amiga y me topé con los incidentes. Primero que nada decir que nunca justificaré nada de ese tipo, lógicamente, por lo tanto es censurable la actuación de los dos grupos enfrentados. No obstante, de justicia es reconocer que había un grupo tranquilo en la calle con su bandera de las siete estrellas sin meterse con nadie, y vinieron a atacar un grupo radical con gritos de "Viva España" o "Separatistas de mierda". Bien es cierto que en el grupo de los independentistas había integrantes del "Frente Blanquiazul", pero también grancanarios, muchos grancanarios independentistas. Por otro lado estaban los radicales del grupo "Ultra Naciente", de ideología neonazi muchos de ellos. La verdad, me considero seguidor de la U.D. Las Palmas, pero estos personajillos me dan vergüenza, claro que seguramente en todos los clubes hay violentos de esta calaña. Vuelvo a repetir, no justifico a nadie, sólo pido que hay que hacer justicia con todos por igual, no dejar impunes a los fascistas del "Ultra Naciente", tanto la Policía Nacional como la prensa.

Me gustaría en este punto señalar lo que vivieron algunos amigos míos fuera del Estadio. Me explico. Estaban en la parada de la guagua un grupo de jóvenes, entre los que se encontraba algún amigo mío, como he dicho. Entonces pasó la Policía Nacional y paró exactamente a uno de ellos, sólo por el hecho de que llevaba un cachorro canario (parece mentira que en Canarias sea motivo de sospecha llevar un cachorro canario). Le pidieron el carnet, no se le indentificaron, le registraron y al encontrarle la bandera canaria de las sietes estrellas verdes, le dijeron que era inconstitucional. Entonces le dijeron a él y al grupo que le acompañaba, que cumplían las características de los sospechosos que buscaban. Afortunadamente no pasó la cosa a mayores, pero me parece que tal acoso es propio de la policía franquista, ¡qué libertad tan bonita tenemos! ¿verdad? Además a muchos otros jóvenes que portaban la bandera de las siete estrellas verdes y un cachorro canario, lo acosaron de una manera propia de cualquier país sumido en un régimen dictatorial.

Bueno, está claro que aunque lo intentaron muchos, nadie consiguió empañar la fiesta canaria. Dijo hace ya muchos años, Martin Luther King, "I have a dream", él tenía el sueño de que los negros se iban a igualar en derechos a los blancos en Estados Unidos. Nosotros tenemos un sueño, por lo menos algunos, y es ver a nuestra selección nacional jugando un campeonato del Mundo. Luchemos por ese sueño.